martes, 26 de abril de 2011

YO NO FUI


El Departamento de Humanidades de la UNS, Lilith Libros y Estación Rosario invitan el viernes 29 de abril a la presentación del proyecto YO NO FUI en Casa de la Cultura UNS, Av. Alem 925, a las 19hs, y el sábado 30 de abril a una nueva edición de Poetas de Estación: rayos y poemas, con María Medrano, Marina Yuszczuk y Roberta Iannamico, de quien presentaremos el libro "Mucho poemas", editado por Voy a salir y si me hiere un rayo (editorial a la que durante muchos años llamé Voy a salir y si me parte un rayo hasta que un día me hicieron caer en la cuenta de que no era ese exactamente el nombre, haciendome sentir un animal)

6 comentarios:

Luis Chaves dijo...

va un abrazo para maría medrano, decile si te acordás.

Anónimo dijo...

Yo no me sentiria un animal. No creo que un poeta deba sentirse un animal por ese lapsus, si asi deberiamos llamar a ese error. Quienes viven exaltada y poeticamente transforman la tradicion en si mismos.
No se trata aqui de tradición (lo unico válido en mi, la tradición y vivir sin nombre) pero ciertamente hay una diferencia entre "que me hiera" y "que me parta". Es evidente. Comprender la diferencia es comprender un Mundo. Y nuestro Mundo. No creo que un rayo pueda simplemente herir,no creo que sea lo usual, la elección del término responde a un deseo de escribir bien, un deseo estilistico del que deberíamos despojarnos. Que me parta es un populismo y nos hace victimas de la sensibilidad malsana de este tiempo.

Marcelo Díaz dijo...

Abrazo entregado, Luis!
Anónimo, gracias por tus comentarios que tanto nos instruyen y purifican.

Anónimo dijo...

Instruir y purificar! Tu lo has dicho.
Poetas! Renunciad a la cerveza y a la pizza.
Esa es mi primera medida de higiene.
Poeta! no leas con una sonrisa en los labios Que tu lectura sea grave, adusta y sufrida.

Demasiado gozamos todos los dias de la ligereza y de los sentidos, demasiado gozamos del presente. Al menos seamos dignos en esto, ¡dejemos de gozar en la lectura!

Marcelo Díaz dijo...

y démonos con un látigo en la espalda mientras leemos! Amén

Anónimo dijo...

Y bien, yo no excluyo el dolor físico en el mismo acto de lectura.