Hoy, domingo de Resurrección, muy de mañana
una nevasca azotó de repente la isla.
Había nieve entre los setos verdes. Mi hijo
me llevó hasta un albaricoquero pegado a la tapia de la casa
apartándome de una poesía en la que denunciaba
a quienes preparaban una guerra que
al continente, a la isla, a mi pueblo, a mi familia y a mí
nos puede tragar. En silencio,
cubrimos con un saco
el árbol a punto de helarse.
Bertolt Brecht
5 comentarios:
Muy bello entrar este domingo de invierno a Acción Literaria y encontrarse con Primavera de 1983
¡Feliz día del niño!
1938, mejor
Entendido.
Gracias, Guille, feliz día también para vos y para el que viene en camino!
Gracias, Yuli.
no- entendido- pero- hermoso
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